Volvemos a la carga tras una temporadilla de inactividad.
Hacía mucho tiempo que no hacía macros. Debo aclarar que mi técnica para hacer este tipo de fotos es de coña. Consiste básicamente en "perseguir bichos por el campo" con un flash en la cámara dotado de un difusor casero, y sin trípode, por supuesto. Si algún especialista en la materia llegase a leer esto, las carcajadas se oirían en Palacagüina, pero es la verdad. Aclarado esto, es un placer mostraros a mi amigo Leonardo.
Comentaré, además, que no tengo precisamente un pulso de ladrón de panderetas. Este punto es especialmente crítico en este tipo de fotografía, donde un movimiento de un par de milímetros de la cámara deja al individuo completamente fuera de foco. Y eso me ha llevado a realizar una compra de la que, por desgracia, no estoy nada contento. Más detalles a continuación.
Un saludo.