Hará ahora casi un año que publiqué aquí una entrada titulada "Mi primera y muy humilde nebulosa". Reproduzco a continuación sus dos primeros párrafos, que vuelven a venir aquí como anillo al dedo, con una modificación que subrayo:
"Alguna ventaja debería tener que esta página no la lea
prácticamente nadie. Así, puedo usarla más como una especie de diario
fotográfico que me permita recordar dentro de un tiempo ciertas cosas,
que como algo dirigido al público y que requiere un mínimo de calidad.
Por
eso hoy pongo aquí la segunda imagen que he conseguido en mi vida de
una nebulosa. La foto es, muy probablemente, un compendio de todos los
errores que se pueden cometer al obtener este tipo de imágenes, y por
eso, entre otros motivos, su calidad es directamente mala... pero es la segunda, qué carajo. Ojalá dentro de un tiempo tenga otras mejores que
poner."
Después de dejar estas cosas claras, subo la imagen en cuestión, que es de nuevo, como en aquella entrada, de la Gran Nebulosa de Orión, aunque ahora en una toma bastante más cerrada:
Puede que la imagen guste más o menos pero, dejando a un lado su muy deficiente calidad, supongo que es fácil entender que para mí supone un salto en lo que había hecho hasta ahora en el complejísimo mundo de la astrofotografía. No hay mas que comparar esta imagen con la de la entrada mencionada al inicio para comprenderlo.
Dejo el resto del rollo para frikis desocupados. Al resto, saludos cósmicos.