Ando de picoteo por las imágenes que me traje de mi última escapada a Asturias, y tal como preveía hay material decente para trabajar. Me lo estoy tomando con calma, dejando el trabajo sucio de selección para más adelante y revelando y editando las fotos que me gustan cuando las veo.
En la entrada anterior cantaba las bondades de portar una cámara ligera que cabe en un pequeño bolso, y es cierto. Casi todo el material que he visualizado hasta ahora está disparado con la Olympus E-M10. Pero ahora ya he llegado al de la Canon, y... al César lo que es del César...
La imagen que sigue es una panorámica de 3 fotos tomada en Llanes. Como casi siempre, a pulso y con una focal demasiado corta, para salir
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