9/10/20

La última del Dr. Carcamalillo: Canon N3 a Olympus RM-CB2

(Aviso a navegantes: hoy no hay foto, hay historia.)

Sí, amigos. El Dr. Carcamalillo ataca de nuevo. Tras su intervención a vida o muerte en mi Canon 7D a finales de 2017, el afamado cirujano ha intervenido de nuevo en mi equipo fotográfico. Aunque en esta ocasión la operación no era tan delicada, el resultado a sido nuevamente satisfactorio: el virtuoso del destornillador de estrella a demostrado ser también un perito del soldador.

He aquí el resultado: el intervalómetro de mi Canon 7D vale ahora también para mi Olympus E-M5 III. Parece sencillo, ¿verdad? Pues la cosa tiene su intríngulis.

Detalles técnicos a continuación. Saludos.

Un intervalómetro es un cacharro que, además de permitir disparar la cámara sin tocarla para evitar vibraciones y fijar el tiempo de exposición en tomas largas, permite automatizar la toma de un número determinado de fotos cada cierto tiempo. Por ejemplo, podríamos disparar automáticamente 53 fotos con un tiempo de exposición de 8 segundos cada 50 segundos.

Son unos dispositivos bastante baratos (unos 15 o 20 € más o menos) y todos hacen lo mismo. La putada es que cada marca utiliza un conector distinto, así que si tienes dos cámaras de marcas diferentes, como es mi caso, necesitas dos aparatos diferentes, lo que es un coñazo. Yo ya tengo demasiada cacharrada para andar comprando más... y ahí entra en escena el Dr. Carcamalillo.

Lo primero fue encontrar información sobre los conectores de ambas cámaras: un N3 en la Canon y un RM-CB2 con minijack de 2,5 mm en la Oly. Afortunadamente di con esta página donde ofrecen una información muy completa sobre las distintas marcas. A continuación nos hicimos con un cable con el susodicho minijack, que resultó ser más barato que la pieza sola. Tiene huevos.

Lo segundo, y a partir de los esquemas de la página citada, identificar los tres cables individuales (enfoque, disparo y tierra) que salen en el cable de cada conector mediante un polímetro. Esto fue particularmente delicado en el caso del N3, porque tiene tres agujeros pequeñísimos en los que no cabe la punta del polímetro, por lo que el diestro cirujano tuvo que introducir una aguja de coser en ellos para probar la continuidad ().

Una vez identificados, la firme mano del Dr. Carcamalillo procedió a la realización de tres sólidas soldaduras y a la posterior sutura de las leves heridas infringidas al paciente. Y así, soy el feliz poseedor de un intervalómetro que vale para dos cámaras de dos marcas diferentes.

Pasamos un buen rato durante la intervención, soltando pecados a diestro y a siniestro ante las dificultades del proceso. Así que... gracias.

Saludos.

3 comentarios:

manugal dijo...

Es satisfactiorio comprobar que usando el metodo cientifico, en el que primero se recaba la mayor informacion posible para posteriormente pasar a la ejecucion, se consiguen resultados satisfsctorios. De la destreza del Dr. Carcamillo no se puede dudar, teniendo en cuenta quienes son sus ancestros. Sobre el material utilizado quisiera hacer una salvedad,que quiero que se entienda como una informacion y nunca como una critica, dicha salvedad es que yo en lugar de cinta aislante remataria el trabajo con canutillo termoretractil, que ofrece un mayor seguridad y una mejor estetica. Bueno,para despedirme lo dicho, un extraordinario trabajo.

CarCamAl Fotos dijo...

Pues sí, manugal, tienes toda la razón. Aún te recuerdo utilizándolo a bordo de cierto Peugeot 205 GTX.
De hecho comentamos la posibilidad durante la intervención, pero no disponíamos del material y el Dr. Carcamalillo es bastante escurridizo, por lo que el asunto no admitía espera.
De todas formas, queda anotada tu sugerencia.

manugal dijo...

Buena memeoria, yo ya ni me acordaba.Veo que fue una opcion a tener en cuenta, pero las circustancias no lo permitieron. Me alegra comprobar que predomina el rigor cientifico, lo cual es normal tratandose de vosotros.